martes, 12 de junio de 2007

ANOTACIONES LIBERALES: UN LIBRO .

Cuando un historiador fué invitado por un Arzobispo (en el extranjero) a comer con él en privado éste Arzobispo, hombre de Dios, con el pleno sacerdocio como todos los obispos y arzobispos, le preguntó qué era para aquel "jovencito" de cuarenta y un años lo más importante. El joven historiador recordó una clase de religión cuando era niño y un sentimiento siempre difuso en su ser y contestó: "la esperanza". "¿Y cuando se acaba la esperanza?", "Siempre es precisa más esperanza." "¿Y si desaparece la esperanza?" "Siempre queda la esperanza".
Trece meses después de aquel almuerzo éste historiador conoció, casualmente, un gran libro: libro que incorporó a su patrimonio espiritual por varios años. "Peregrinos en el camino de la Esperanza". Redactado por F.J. Nguyen van Thuan. Ha pasado un año y medio sin leer dicho libro. Libro repleto de matices, sabiduría, emoción encubierta en sus páginas. Es mucho tiempo un año y medio. Hace unos días éste aún joven historiador volvió a encontrarse con él. Los libros son también aquellos amigos con los cuales puede siempre dialogarse: le alegró aquel redescubrimiento.
Éste libro se refiere y se dirige , en última instancia, a la dimensión interior siempre existente en todos los seres humanos. Pocas veces el lector se encontrará con una coherencia tan radical y completamente integrada, irreprochable teológicamente y asequible a todos además. El libro que se comenta hoy expresa la religión hecha vida de una persona: en el diálogo con Dios y como modelo para vidas de otros. Está redactado desde el corazón y es un camino a la Oración. Subyacen en el mismo autor de dicho libro sin duda sus conversaciones con Dios púdicamente veladas.
Conversar directamente con Dios es hoy un poco complicado: es preciso tener, primero, humildad de corazón y, segundo, para qué negarlo, valor. Santa desverguenza decía un santo de la Iglesia, no piensen además de alguien que está loco en los tiempos que corren.
Aquel campesino de Ars, quien entraba todos los días en la Iglesia y hablaba unos minutillos con Dios, dialogando con él, vería hoy aparecer ante él tal vez en nuestros días al pelotón de psiquiatras: humildad, pues, de corazón y tranquilidad de espíritu ante las limitaciones de la condición humana siempre común a todos .
La base de éste libro son, precisamente, las reflexiones de un hombre bueno: F.J. Nguyen Van Thuan y su hilo conductor, en última instancia, está basado en aquellos escritos pergeñados en cualquier medio y redactados en la oscura noche, internado tras ser detenido en un campo de concentración. Escritos que iluminaron a los boat people vietnamitas también después de 1975. Éste libro tiene pues, en parte, un sentido de testimonio, de aceptación de los desastres que sobrevinieron sobre una nación mártir (basta recordar las magníficas crónicas enviadas por un periodista como Ansón desde Saigón) y es siempre inestimable para un historiador. El resúmen de éste libro es "Todo Sea por Cristo Rey" (no entendido en éste libro políticamente, quede esto claro desde ahora, sino como un modelo de vida interior).
Si algo trasluce éste libro, en última instancia, está resumido en la Sagrada Escritura: la importancia que se da al poder de la oración. Explicíta también la importancia de la Santísima Virgen como corredentora de los seres humanos y de la humanidad. En Lucas, 11.9, se resume finalmente esta importancia: "Pedid y recibiréis, buscad y encontraréis, llamad y os abrirán".
Mas, simultáneamente, se explicita en el mismo algo esencial: aquel capítulo que empieza con el encabezado "Tú tienes una patria" (páginas 499 - 500) explicíta, en última instancia, que el amor a la Patria de donde cada uno es debe siempre palpitar en la sangre que corre por sus venas. Y sobre todo, estando la patria reunificada en el caso concreto del país de este hombre de Dios, este libro explicíta, siempre también, que es preciso abrirse, con el perdón y el amor , a los demás.
En resumen, un libro grandioso que siempre hace ver las limitaciones de muchos, incluído quien reflexiona ante una amable invitación aquí sobre el mismo.