Debe recordarse la anterior entrada referida a la revista de El Jueves. En éste caso no hay duda sobre la posición del autor de éste blog respecto a esta polémica: si El Jueves quería vender más, el mejor favor que se le hacía era secuestrar la revista por la cerdada cometida contra la imagen del futuro monarca de todos los españoles. Lo más adecuado, tal vez, hubiese sido comprar íntegramente la edición y hacerla desaparecer de los kioscos (generaría un asombro masivo), poner después la denuncia; los seguidores de El Jueves (revista que no se caracteriza por su buen gusto) se sentirían extasiados y los contrarios, desde el primer momento, a la cerdada (entre ellos el autor de éste blog) se sentirían más tranquilos.
Las personas de órden siempre pensaremos: vaya guarrada , pero con esta decisión no se dan municiones a los contrarios a la Monarquía.También esta actuación de la Fiscalía reclamando la defensa de la imagen de la Corona puede ser convertida por un sector sociológico significativo, opuesto a ella, como un boomerang contra quienes dice defender.
El problema no es, sin embargo, la cerdada cometida, por la revista, contra la imagen del heredero de la Corona de todos los españoles constitucionalmente consagrada: pues dichas cerdadas son recurrentes en dicha revista contra personalidades e instituciones. Estas cerdadas existen en la prensa de otros países : ello no afecta a las instituciones que estas personas encarnan. La trayectoria de dicha revista, además, es suficientemente clara, en una serie de aspectos, contra la imagen de personalidades, como de creencias, y la fiscalía nunca se ha movilizado: entre otras, contra la imagen de un ex presidente que gobernó con legítima mayoría absoluta por voluntad del pueblo. Este ex presidente, el presidente Aznar, nunca dijo nada al respecto ni movilizó la fiscalía. En otro caso, las blasfemias contra la religión abrumadora sociológicamente en España.
Lo interesante se refiere a otras atroces realidades sociológicas que subyacen en las páginas de El Jueves, revista que en algunas ocasiones he ojeado : lugar, la peluquería a la que acudo. La estética cutre y de mal gusto, aceptada sociológicamente por muchos años, encubre también el pataleo de unos niños inocentes de muchas cuestiones como víctimas de muchas otras.
Si El Jueves se adquiere y se lee, masivamente por los clientes, en una de las mejores y no más caras peluquerías de la ciudad hispalense, donde la he ojeado en ocasiones, existe evidentemente también un problema sociológico que explica el éxito de ésta revista. La descripción simultánea de problemáticas realidades vitales para muchos españoles es una de las causas de su larga existencia y de su presencia en muchos lugares públicos: peluquerías, bares, cafeterías, etcétera.
Hoy, por ejemplo, la prensa se abre con las declaraciones de la eurodiputada Rosa Díez, referidas al uso de un partido político como apisonadora de poder, poder partidista siempre utilizado en beneficio del mismo. Igualmente ésta eurodiputada alude al abandono, por parte de dicho partido, de su programa para el cual fué votado en las elecciones del 14 M, tras el llamado vuelco electoral
En resumen, entre otras cuestiones, Rosa Díez denuncia una excesiva patrimonialización de lo público : patrimonialización por parte de los afiliados de un partido, en el cual hasta ahora mismo militó.
Éste sí que es un problema de debate, interno dentro de un partido (con una tentación crecientemente totalitaria y estéticamente tercermundista) que ha sido importante en la transición democrática : y externo, pues su gestión afecta a toda la sociedad. Tema de debate importante y de fondo: los primeros interesados, naturalmente, en resolverlo deberían ser los mismos miembros de dicho partido y sus afiliados, o los colaboracionistas de ellos, que abrumadoramente copan innumerables puestos públicos, cuestión estadísticamente estudiada y explicitada en la misma prensa, cuando en Andalucía está naciendo un régimen. Un régimen, identificado en unas siglas, auxiliado por una ultraizquierda con una cuota de poder desproporcionada respecto a su importancia minoritaria expresada electoralmente, que actúa como apisonadora de poder y tritura sistemáticamente a muchos que desean, acatando el régimen constitucionalmente vigente, salvaguardar su profesionalidad y su independencia profesional.
Mientras tanto, debe quedar clara la posición del autor de éste blog: siempre en contra de la censura.
Nota: vid. entrada de 22 - 07 - 2.007.
P.d.; Sobre la segunda víctima de la cerdada, por caballerosidad y respeto ni se la menciona; es la madre de la futura Reina de todos los españoles.
Las personas de órden siempre pensaremos: vaya guarrada , pero con esta decisión no se dan municiones a los contrarios a la Monarquía.También esta actuación de la Fiscalía reclamando la defensa de la imagen de la Corona puede ser convertida por un sector sociológico significativo, opuesto a ella, como un boomerang contra quienes dice defender.
El problema no es, sin embargo, la cerdada cometida, por la revista, contra la imagen del heredero de la Corona de todos los españoles constitucionalmente consagrada: pues dichas cerdadas son recurrentes en dicha revista contra personalidades e instituciones. Estas cerdadas existen en la prensa de otros países : ello no afecta a las instituciones que estas personas encarnan. La trayectoria de dicha revista, además, es suficientemente clara, en una serie de aspectos, contra la imagen de personalidades, como de creencias, y la fiscalía nunca se ha movilizado: entre otras, contra la imagen de un ex presidente que gobernó con legítima mayoría absoluta por voluntad del pueblo. Este ex presidente, el presidente Aznar, nunca dijo nada al respecto ni movilizó la fiscalía. En otro caso, las blasfemias contra la religión abrumadora sociológicamente en España.
Lo interesante se refiere a otras atroces realidades sociológicas que subyacen en las páginas de El Jueves, revista que en algunas ocasiones he ojeado : lugar, la peluquería a la que acudo. La estética cutre y de mal gusto, aceptada sociológicamente por muchos años, encubre también el pataleo de unos niños inocentes de muchas cuestiones como víctimas de muchas otras.
Si El Jueves se adquiere y se lee, masivamente por los clientes, en una de las mejores y no más caras peluquerías de la ciudad hispalense, donde la he ojeado en ocasiones, existe evidentemente también un problema sociológico que explica el éxito de ésta revista. La descripción simultánea de problemáticas realidades vitales para muchos españoles es una de las causas de su larga existencia y de su presencia en muchos lugares públicos: peluquerías, bares, cafeterías, etcétera.
Hoy, por ejemplo, la prensa se abre con las declaraciones de la eurodiputada Rosa Díez, referidas al uso de un partido político como apisonadora de poder, poder partidista siempre utilizado en beneficio del mismo. Igualmente ésta eurodiputada alude al abandono, por parte de dicho partido, de su programa para el cual fué votado en las elecciones del 14 M, tras el llamado vuelco electoral
En resumen, entre otras cuestiones, Rosa Díez denuncia una excesiva patrimonialización de lo público : patrimonialización por parte de los afiliados de un partido, en el cual hasta ahora mismo militó.
Éste sí que es un problema de debate, interno dentro de un partido (con una tentación crecientemente totalitaria y estéticamente tercermundista) que ha sido importante en la transición democrática : y externo, pues su gestión afecta a toda la sociedad. Tema de debate importante y de fondo: los primeros interesados, naturalmente, en resolverlo deberían ser los mismos miembros de dicho partido y sus afiliados, o los colaboracionistas de ellos, que abrumadoramente copan innumerables puestos públicos, cuestión estadísticamente estudiada y explicitada en la misma prensa, cuando en Andalucía está naciendo un régimen. Un régimen, identificado en unas siglas, auxiliado por una ultraizquierda con una cuota de poder desproporcionada respecto a su importancia minoritaria expresada electoralmente, que actúa como apisonadora de poder y tritura sistemáticamente a muchos que desean, acatando el régimen constitucionalmente vigente, salvaguardar su profesionalidad y su independencia profesional.
Mientras tanto, debe quedar clara la posición del autor de éste blog: siempre en contra de la censura.
Nota: vid. entrada de 22 - 07 - 2.007.
P.d.; Sobre la segunda víctima de la cerdada, por caballerosidad y respeto ni se la menciona; es la madre de la futura Reina de todos los españoles.
