jueves, 6 de septiembre de 2007

¿EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA?(I)

¿Educación para la ciudadanía concentrada en una asignatura única? De entrada, no es pertinente . Recuérdese, siempre, que Educación para la Ciudadanía es indisociable a Educación por la Paz. El problema es de nuevo metodológico e ideológico y religioso: ¿qué quiere decirse cuando se habla de Paz? .
Y se dice de entrada; la propuesta de dicha asignatura es, finalmente, incongruente. En otras cuestiones sobre la misma nueva materia no entra el autor de éste blog: ya han sido planteadas por autoridades de la misma jerarquía católica, asociaciones de padres, grupos de profesionales, etcétera.
Se habla, aquí, de una experiencia (larga por cierto) como docente universitario.
Se dice aquí: una propuesta incongruente e innecesaria. No es una propuesta necesaria en el sentido que todo el diseño curricular del sistema educativo logsiano previo estaba concebido en función del concepto de transversalidad que, como una espiral, recorría todas las materias en función de las imágenes motrices de : Conceptos, Procedimientos, Actitudes y Aptitudes.
Es decir, si estamos en un sistema democrático y constitucional, de estado de derecho, obviamente el estado pretende formar buenos ciudadanos, colaborando con las familias y las religiones: mas el estado no puede suplantar el derecho de los padres a educar a los hijos ni sus especiales relaciones estipuladas constitucionalmente con la Iglesia católica.
De todas formas la jerga logsiana es, en ocasiones, sorprendente. Se verá en su momento. Como profesor debía acatar el sistema existente: existe sobrada constancia de ello en mis apuntes de clase. Como profesional , no siendo profesor en activo desde Diciembre de 2.002, podría plantear muchas reservas sobre dicho diseño, lo cual es legítimo. En otras entradas previas se habla además, en éste blog, de cuestiones educativas.
Al menos, el ambiguo sistema educativo anterior dejaba una triple libertad: daba libertad a las CC.AA, daba libertad a los centros, daba libertad a los equipos docentes , daba libertad a los profesores de acuerdo con los criterios de los equipos docentes. Nunca fué discutido.
Por ello, por muchos años, el sistema logsiano no fué enteramente demoledor: pues, por ejemplo, los centros concertados, inferiores al nivel universitario, adaptaban los contenidos en función de sus idearios y de sus metodologías y tradiciones pedagógicas específicas previas.
Daba igual que un centro concertado fuese hipotéticamente budista, hipotéticamente musulmán, hipotéticamente masónico (los hay), siguiese la Institución Libre de Enseñanza (pero fuese en realidad católico, el autor de éste blog conoce uno con Capellán incluído y el lema "¡Dios está con el Colegio!") o plenamente católico, promovido por empresas no confesionales estrictamente, padres o por órdenes religiosas e instituciones eclesiales, entendido strictu sensu .
Daba igual también que la avasalladora realidad de los centros concertados sean afortunadamente todos católicos. El derecho, como Ciencia jurídica, está basado siempre en abstracciones aplicables a todos por igual y permitía, a los centros concertados, siempre adaptar el sistema logsiano a sus idearios. Como los centros plenamente públicos los han adaptado al suyo.
La problemática inicial de ésta asignatura es incongruente, en consecuencia; pues previamente cada centro adaptaba, acorde a su ideario y cosmovisión , los contenidos a impartir y naturalmente cada centro pretende formar a los mejores ciudadanos desde su cosmovisión.
El problema se encuentra en otra cuestión, se encuentra en el método; pues con frecuencia se olvidan muchos que, en el caso que atañe a ésta nueva materia, el método es para quienes imponen éste nuevo modelo y materia, en última instancia, la nueva ideología. Sobre ésto se hablará mañana.