lunes, 11 de agosto de 2008

GEORGIA (I)

En los años sesenta, pasando las vacaciones en una ciudad de la Costa del Sol, siendo niño, estaba invitado con nosotros, unos días, un miembro de la Casa Real Bagrátida; no era español de nacionalidad. Era un gigante encantador, de avanzada calvicie, complexión atlética, políglota, inteligente con sentido del humor, socarrón con él mismo y ...le encantaba la cerveza.

Un dulce y consolador recuerdo en las tardes cálidas de nuestra Andalucía, Costa del Sol, España. Mayo de 2.007. Un primo nuestro, parisino, estuvo con su madre y su esposa quince días en Andalucía. Lo conocí personalmente en una boda, en los Salones del Hotel Ritz en París, el año 1969 (*). Boda de una hermana de mi madre. Nosotros nos alojamos en el Ritz una semana, cortesía de nuestros abuelos maternos. Nuestro primo parisino se quedó a dormir ésa noche en el hotel; y entonces tuvimos, un niño libanés, tres niños españoles y uno francés, nuestra primera y memorable batalla de almohadones (almohadazo va y viene...).
Nuestro primo desde ése momento, pues todos los niños firmamos las paces, vino a España, muchos años, en nuestra infancia y adolescencia, pasando las vacaciones en lo que entonces era nuestra Villa familiar (a cinco kilómetros curiosamente de donde vivo ahora) , como en una finca -propiedad entonces familiar, de mi madre y su único primo hermano - ubicada en la provincia de Cádiz.
Y en esos desplazamientos se incluían los niños.
Aquel simpático caos infantil intercultural, conservado en abundantes películas del entonces Super8, y numerosísimas fotografías, estaba coordinado por nuestra Tata (nodriza en andaluz) quien era ... de La Algaba, pueblecito cercano a Sevilla.
Hubo, varios veranos, niños de tres familias de la ciudad hispalense, y de dos nacionalidades más. Nuestra Tata trataba de organizar los desayunos, almuerzos, meriendas, y nos vió crecer. Nos daba besos, nos reñía a veces y, ocasionalmente, mediaba en nuestras peleas infantiles.
Nunca en las batallas de almohadones, pues eran por la noche y, además, nunca había lesionados gracias a Dios.
Y fué, curiosamente, nuestra tata quien nos sugirió a los niños, un día, representar por las noches obras de teatro; pues ella era forofa tanto de los culebrones radiofónicos, como de los clásicos del Teatro español (y algún drama del Teatro griego), retransmitidos continuamente en la Tv de entonces.
Desde avanzados los años ochenta ... no volví a ver a nuestro primo. Yo conocí, casualmente y consecuencia de un simpático accidente en una Facultad universitaria, a la mía; es cierto que nos presentaron bastante después de ello.
Mi primo conoció, muchísimo después, y en ambientes diplomáticos, a su esposa.

Estuve invitado en la boda de mi primo, como mi familia, mas un problemilla de fechas impidió mi presencia allí en París. Mi hermana trabaja desde hace unos años en USA, en una Universidad (considerada una de las diez mejores del mundo); fué indirectamente a la boda desde USA.
Nuestro primo , francés de nacionalidad, medio ruso de sangre, aprovechó para venir a visitarnos, en Mayo de 2.007, un break; estaba agotado por su trabajo (aunque sea hijo de Princesa...trabaja mucho, como su madre) y vino, con su madre, a vernos, nuestro primo con su esposa y con su hija.
Estuve invitado en Mayo de 2.007, por ellos, una semana en la Costa del Sol. Su joven esposa, dama georgiana, bella y distinguida, universitaria y trabajadora antes de casarse, además de políglota, se llama Nino, y es una Princesa; y la madre de nuestro primo y cuasihermano, también.

De manera que, por circunstancias sorprendentes de la existencia, he conocido - en mi vida - a dos georgianos. Una persona, un Bagration, con esa encubierta tristeza y nostalgia de quienes pierden su patria, quien nos cogía de la mano, a mí y a mi hermano segundo, y bajaba con nosotros a la playa siendo niños.
Otra persona, la esposa de mi primo. Y con mi tía, mi primo y su esposa georgiana y la hija de los dos pasé una semana inolvidable en la Costa del Sol, aparte de otros encuentros futuros.
Igualmente, sabiendo esos tristes y angustiosos sucesos sobre Georgia, recuerdo ahora libros de mi biblioteca sobre la República de Georgia y su Historia.
Época en que las carreras universitarias eran....carreras.

P.d.: (*) Debe recordarse la Introducción a Entradas sobre el Líbano, Introducción, fecha de 28 de Junio de 2.007, Homenaje a una gran dama libanesa.